El invierno de 1976/77 fue uno de los más lluviosos de la historia, con más de 60 centímetros de precipitación registrada entre octubre y marzo, lo que hizo que, después de tres años de sequía, la lluvia fuera muy bienvenida. La vendimia comenzó el 28 de septiembre en condiciones de calor extremo y los rendimientos en el valle fueron en general altos.
Para Taylor’s el año de 1977 no solo ha sido una vendimia increíble, como también fue un año clave para la Quinta de Vargellas porque la electricidad llegó a la propiedad por primera vez.
Gran ciruela roja, vibrante. Nariz fresca, de fruta limpia con notas florales delicadas. Un vino con gran complejidad de fruta – bayas y especias, denso, delicioso y concentrado, pero con un final delicado, suave y con fuerza interior.
Esta casa productora debe ciertamente ser el Latour de Portugal. Sus vinos de Oporto tienen mucho potencial aunque son muy impresionantes mientras...
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