Un invierno lluvioso en 1975 fue seguido por un largo verano seco en que casi no llovió, a la excepción de una pesada tormenta en mayo. La vendimia comenzó el 6 de octubre. Por causa de la lluvia de septiembre, los rendimientos fueron generalmente más altos que lo esperado.
El mejor de los vinos de Oporto vintage de 1975 mientras fue criticado como muy ligero, ha desde entonces desafiado sus críticas y logrado una gran elegancia y madurez.
Una nariz ligera y femenina de cereza, fresa salvaje y un toque de lápiz de plomo. Nada complejo, pero limpio y fresco. Boca de medio cuerpo, muy afrutado pero faltando un poco de estructura. Limpio, atractivo, textura suave, pero un vino de Oporto vintage de Taylor’s menos intelectual para beber sin pensar demasiado.
El mejor 1975 de lejos.
Fácil de beber a los 36 años de edad.
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