Después de una vendimia húmeda de 1998 tuvimos un invierno muy frío y seco, con muy poca precipitación. Consecuentemente, la brotación comenzó dos semanas más tarde que lo normal a mediados de marzo.
Abril y mayo fueron meses muy húmedos, lo que resultó bueno para la reposición de reservas de agua que estaban muy bajas. La floración se produjo a mediados de mayo en condiciones húmedas, sin embargo gracias al gran número inicial de inflorescencias el rendimiento global no fue significativamente perjudicado.
Junio y julio fueron muy calurosos con varias ocasiones en las cuales las temperaturas se elevaron de los 40ºC. El calor extremo de verano fue interrumpido en torno al elipse (el 11 de agosto), con tres días de lluvia fuerte y lo mismo ocurrió en los tres primeros días de septiembre.
Afortunadamente, el final de septiembre estuve seco y cálido, produciendo vinos de Oporto notablemente buenos no obstante la precipitación registrada.
Color oscuro de teja. Nariz intensa a frutas rojas, con notas de menta y de hierbas. Un Terra Feita muy típico. Boca firme con taninos delgados. Sabor afrutado discreto: ciruela, fruta negra, casis. Final largo y envolvente.